jueves, 11 de octubre de 2007

Berserk



"we grab swords to protect small wounds that had been buried deep in old memories"


Fue cerca de una navidad cuando conocí este anime. Habían terminado las obligaciones de fin de año y me encontraba sin nada entre las manos. Tranquilo y en soledad, decidí verlo y fue como una adicción. En primer lugar los colores y el dibujo, con tonalidades fuertes y oscuras. Por otro lado la música. Hay algo atrapante en la música, que remite por momentos a un misterio, por otros a la locura y a lo demoníaco; pues ambas cosas persiguen a Gatsu -nombre del protagonista- a lo largo de la serie. Pero también está aquella parte de la música que nos contagia de una nostalgia "materno-oceánica", el deseo de un calor que conocemos bien y que al igual que Gatsu anhelamos.

Gatsu es una especie pharmakos-tyrannos pues cumple tanto la función de exhiliado como la del detentor del poder fálico encarnado en su exceso. Es un héroe griego cuya hybris (desmesura) tiene su origen en el mismo nacimiento. Un feto que se asoma al mundo desde el cadaver de una madre inherte, colgada de un árbol. Paradójicamente, un ser vivo que nace de la muerte; algo monstruoso, inconcebible, portador de desgracias para aquellos que quieran cobijarlo en su comunidad. Es adoptado por Gambino, un mercenario que lo educa para la batalla. Pero un ser como Gatsu no puede ser aceptado, incluso en una manada de mercenarios, y dado su caracter de chivo expiatorio, debe huir y entablar una vida solitaria. Sin sueños o anhelos, vive tan sólo en la solitaria "inercia" de la autoconservación; su cuerpo se mueve en una lógica animal, donde su espada fálica y su violencia salvaje se apropian de una realidad que se manifiesta en el choque de la carne contra el acero, sin sueños de por medio.



Pero en su viaje conoce a la Banda de los Halcones, liderada por Griffith. En tanto Guts es la fuerza y la desmesura salvaje sin sueños, cargada de una nostalgia hacía un vínculo perdido de antemano, Griffith es la elegancia armónica de la cultura, lleno de sueños y grandes proyectos, largos discursos y suaves pero fuertes palabras. Su sueño es tener un reino propio, en ese mundo medieval violento. En el encuentro entre Griffith y Guts se juega una complementación, un vínculo dónde cada uno puede sentir la sensación de completitud. Griffith brinda a Guts su hoguera de los sueños. Si bien guts no tiene sueño alguno -pues no es capaz de subjetivar el goce violento de su espada fálica-, sin embargo es capaz de articularse en la subjetividad deseante de Griffith, y poner su espada al servicio de un sueño adyascentemente propio, en tanto si bien la hoguera no es suya, ésta le brinda el calor que no encontró en todo su tiempo de errancia. Por otro lado Griffith encuentra en Guts un instrumento de poder único para el cumplimiento de sus sueños. Pero no sólo eso; Griffith también experimenta una fascinación al ver al espíritu fuerte y trágico de Guts. Pues en tanto Griffith es apolíneo, medido, esbelto, armónico, Guts es dionisíaco, desmedido, violento, de un vacío profundo. Los ojos de Griffith tienen la llama de los sueños y la convicción; los de Guts tienen la profundidad de un vacío desertico, nomádico y violento, así como nostálgico -de otra manera no habria fascinación de Guts hacia Griffith-. Hay entonces una especie de enamoramiento mutuo.






El fuego de los sueños que Griffith trae consigo alimenta toda la Banda de los Halcones. Como Guts explica de forma realmente conmovedora a través de la “metáfora de las hogueras”, el sueño de Griffith actúa como una gran hoguera, que calienta los cuerpos fríos de aquellos con pequeños sueños y una débil voluntad, en un mundo sangriento y hostil. Guts sin embargo viaja sin hoguera alguna, y se une a la Banda de los Halcones para resguardarse en el sueño de Griffith, a quien ayudará, pero de quien deberá progresivamente distanciarse, en la búsqueda de su propio sueño.

El tercer personaje principal es Caska, una mujer rescatada por Griffith. Hasta la llegada de Guts, ocupaba un lugar privilegiado, del cual se ve desplazada. Entre los tres personajes surgirá entonces una trama de vínculos íntimos en relación al desear y el ser deseado.


Detrás de todos estos deseos, habrá una moira divina (destino), un plan trazado por los dioses:




En este mundo, el destino del hombre esta controlado por ciertas entidades o leyes trascendentes, como la mano de Dios. Al final, los hombres sabrán que no tienen control sobre su propia voluntad”


Sin embargo y al igual que en la antigua Grecia, la voluntad de los dioses no abarcará el plano de inmanencia en toda su consistencia, llevando a que la historia se desarrolle por cauces inesperados, inclusive para las mismas entidades divinas. El behelit, especie de talismán que cuelga del cuello de Griffith, cumplirá una función muy importante en la trama de la historia. Me gustaría seguir contando, pero me quedo acá nomás, para no hacer spoiler y estropearles la historia.
El anime consiste en 25 capítulos, y abarca menos de la mitad del manga, que actualmente sigue saliendo, siendo el número 32 el último en hacerlo.


Por más informacion esta la wiki: http://es.wikipedia.org/wiki/Berserk_(manga)

1 comentario:

Anónimo dijo...

gracias pero en realidad me gustaria que continuaran narrando toda la historia para comprender tu punto de vista